Hola y bienvenida al artículo del blog de esta semana. Me alegra mucho que estés aquí porque vamos a profundizar en un tema que es muy personal pero increíblemente universal: cómo el trauma infantil puede moldear tus hormonas e impactar tu salud. Si alguna vez te has sentido "extraña" o has tenido problemas con un sobrepeso persistente, cambios de humor o fatiga inexplicable, es posible que hoy encuentres algunas respuestas reveladoras. Así que preparate un reconfortante matcha latte, acomódate y analicemos esto juntas.
Mi experiencia: como me liberé de la lucha
Al igual que millones de mujeres, he vivido con lo que llamamos traumas con “T minúscula”, el tipo de experiencias que pueden no parecer dramáticas u horrorosas a primera vista, pero que dejan una marca innegable. Mi infancia fue una mezcla de hermosos recuerdos y momentos de estrés que moldearon silenciosamente mi vida. Durante años, sentí que estaba en guerra con mi cuerpo. Probé todas las dietas, hice ejercicio sin parar y aun así me encontraba atrapada en ciclos de anorexia, bulimia y dismorfia corporal.
El Dr. Gabor Maté , un reconocido experto en traumas, explica que nuestras primeras experiencias no solo moldean nuestros patrones emocionales, sino también nuestra fisiología. El trauma no es solo lo que nos sucede, sino la forma en que nuestro cuerpo se aferra a esos eventos. Cuando aprendí esto, comencé a ver mis problemas con el peso y la imagen corporal como síntomas de algo más profundo: una historia sin resolver que mi cuerpo había estado cargando desde la infancia.
Cuando aprendí esto, comencé a ver mis problemas con el peso y la imagen corporal como síntomas de algo más profundo: una historia sin resolver que mi cuerpo había estado cargando desde la infancia.
La verdadera llamada de atención llegó a los 40, cuando me di cuenta de que la lucha no consistía solo en perder peso, sino en comprender la historia más profunda que mi cuerpo intentaba contarme. Esa historia tenía sus raíces en cómo mis experiencias de la infancia habían afectado a mis hormonas y a mi salud en general.
Si esto te suena familiar, quiero que sepas que no estás sola. Existe una poderosa conexión entre el trauma infantil y el equilibrio hormonal de tu cuerpo. ¿Y la mejor parte? Puedes reescribir esta historia sin ningún problema.
La ciencia: cómo se relacionan el trauma y las hormonas
Profundicemos en la fascinante ciencia que se esconde detrás de esta conexión. Cuando se sufre un trauma infantil, el sistema de respuesta al estrés del cuerpo (alimentado por una hormona llamada cortisol) puede entrar en una situación de hiperactividad. El cortisol, a menudo llamado la "hormona del estrés", es controlado por el eje hipotálamo-hipofisario-adrenal (HPA). Su función es ayudar a manejar las emergencias, pero cuando el sistema se ve constantemente afectado por el estrés, puede empezar a funcionar mal.
El Dr. Bruce Perry , experto en neurodesarrollo y trauma, destaca que la activación crónica del sistema de respuesta al estrés altera el desarrollo cerebral y la salud general. Por eso, los traumas no abordados suelen manifestarse en la edad adulta en forma de problemas de salud mental, problemas metabólicos e incluso trastornos autoinmunes.
Con el tiempo, la desregulación del cortisol no solo causa estrés, sino que crea efectos dominó en todo el cuerpo:
Problemas de salud mental: Los niveles elevados de cortisol pueden reconfigurar el cerebro y hacer que sea más vulnerable a la ansiedad, la depresión e incluso el trastorno de estrés postraumático. No todo está en la mente, sino en el cerebro, que intenta adaptarse al estrés constante.
Desorden metabólico: el cortisol crónico puede promover el almacenamiento de grasa (especialmente alrededor del abdomen), la resistencia a la insulina y los trastornos metabólicos. Por eso las dietas suelen fracasar: no se trata solo de calorías, sino de química.
Alteraciones de la salud reproductiva: el cortisol también puede causar estragos en el ciclo menstrual, la fertilidad e incluso los resultados del embarazo. Cuando el cuerpo está en modo de supervivencia, la salud reproductiva suele quedar en segundo plano.
Thich Nhat Hanh , un maestro espiritual al que nunca he conocido pero al que considero uno de mis grandes maestros, nos recuerda que el cuerpo contiene todo lo que experimentamos. Si no abordamos las raíces de nuestro estrés, quedamos atrapadas en ciclos de desregulación que ninguna dieta o rutina de ejercicios puede solucionar por sí sola. Lo que estoy diciendo aquí se consideraba muy "esotérico" hace apenas unos años. Sin embargo, la física cuántica ha logrado demostrar la ciencia que hay detrás de ello. Y no te preocupes: dedicaré futuros artículos a esto para que tú también puedas acceder a esta maravillosa información, que tiene el poder de cambiar tu vida por completo.
Romper el ciclo: Tus hormonas, tu poder
Aquí tienes la buena noticia: PUEDES SANAR . Tus hormonas son dinámicas y adaptables (al igual que tus células) y, con el apoyo adecuado, tu cuerpo puede recuperar el equilibrio. Aquí te explico cómo empezar:
Conoce tus desencadenantes: llevar un diario es una herramienta poderosa. Pregúntate: ¿Cuándo me siento más abrumada? ¿Qué situaciones me hacen sentir insegura o ansiosa? Ser consciente de estos patrones puede ayudarte a dar el primer paso hacia la sanación. El Dr. Gabor Maté lo llama "indagación compasiva": aprender a observar tus desencadenantes con curiosidad en lugar de juzgar.
Refuerza tus hormonas con alimentos: los alimentos son medicina. Incorpora alimentos que favorezcan las hormonas, como el salmón rico en omega 3, probióticos que curen el intestino, como el sauerkraut o el kimchi, y verduras que favorezcan el hígado, como la rúcula. Alimentos como las semillas de lino y las nueces, ricos en fitoestrógenos, también pueden ayudar a equilibrar los niveles de estrógeno de forma natural.
Muévete en armonía con tu cuerpo: el ejercicio es esencial para reducir el cortisol, pero es importante elegir actividades que te hagan sentir bien. La maestra espiritual Louise Hay recomendaba movimientos suaves y amorosos como el yoga o caminar, que ayudan al cuerpo sin añadir estrés adicional.
Encuentra seguridad emocional: la sanación no es solo física, también es emocional. Busca un terapeuta con un enfoque holístico o explora prácticas de atención plena como la meditación, el trabajo de respiración o los escaneos corporales. El método de "experiencia somática" del experto en traumas Peter Levine puede ayudarte a liberar la tensión almacenada en tu cuerpo a partir de experiencias pasadas.
Sanando Generaciones: La Visión Integral
Uno de los aspectos más alucinantes del trauma y las hormonas es cómo los efectos pueden propagarse a lo largo de generaciones. Los estudios muestran que la desregulación del cortisol causada por un trauma no solo te afecta a ti, sino que puede influir en tus hijos e incluso en tus nietos. Esto se debe a que el trauma puede alterar la forma en que se expresan tus genes, un fenómeno conocido como epigenética.
Pero lo bueno de la sanación es que, cuando priorizas tu salud hormonal, no solo estás cambiando tu vida, sino que estás creando un legado de bienestar para las mujeres que vendrán después de ti. Como escribe la Dra. Nicole LePera : "Romper los ciclos generacionales no se trata solo de lo que dejamos de hacer, sino de lo que empezamos a hacer de manera diferente".
Demos juntas el primer paso!
Si mi historia te resulta familiar, quiero que sepas que es posible sanar. Tu pasado no tiene por qué definir tu futuro. Al comprender la conexión entre el trauma infantil y las hormonas, puedes dar el primer paso hacia la libertad: liberarte de la lucha, la frustración y los ciclos que te frenan.
Tómate un momento hoy para sintonizarte con tu cuerpo. Escucha lo que te dice. Si estás listo para profundizar más, recuerda que tengo recursos gratuitos en mi sitio web para ayudarte a comenzar tu viaje de sanación. No tienes que recorrer este camino solo: estoy aquí para animarte en cada paso del camino.
Y si sientes que estás lista para tu gran transformación, mi próximo Programa de Coaching “Women Rising: The SoulSync Journey”—Una experiencia transformadora para la sincronía hormonal, el autodescubrimiento y el crecimiento personal” comienza el 6 de enero de 2025. Los suscriptores de mi Newsletter recibirán la información primero, junto con un descuento por unirse temprano, ¡así que no olvides suscribirte!
Brindo por tu recuperación y prosperidad, porque no mereces menos. Cuéntame lo que piensas en los comentarios y sigamos conversando. ¡Juntas podemos lograrlo!
Fuentes:
Sources:- Gestational and Postnatal Cortisol Profiles of Women with Posttraumatic Stress Disorder and the Dissociative Subtype. Seng, Julia S. et al. Journal of Obstetric, Gynecologic & Neonatal Nursing, Volume 47, Issue 1, 12 – 22
https://www.jognn.org/article/S0884-2175(17)30441-0/fulltext.
What is the hypothalamic-pituitary-adrenal (HPA) axis? https://my.clevelandclinic.org/health/body/hypothalamic-pituitary-adrenal-hpa-axis
Dr. Gabor Mate, "The Body Keeps the Score"
Dr. Bruce Perry, "The Boy Who Was Raised as a Dog
Thich Nhat Hanh, "The Miracle of Mindfulness" and "You Are Here"- Dr. Nicole LePera (The Holistic Psychologist), "How to Do the Work"- Dr. Peter Levine, "Waking the Tiger: Healing Trauma"
Epigenetic Study: Huliyar, Bhavana (2021) "Transgenerational Epigenetic Inheritance: What if Trauma and Stress Could Be Genetically Inherited?," The Synapse: Intercollegiate science magazine: Vol. 27: Iss. 1, Article 9. Available at: https://digitalcommons.denison.edu/synapse/vol27/iss1/9
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